"Eros y El Talismán".

Capítulo 41. NATURALEZA DE LA PAREJA

No es necesario que leas este capítulo relativo a las parejas que perduran algún tiempo.

El plan del hombre viril no es formar parejas. No es involucrarse en relaciones durables. Solo se aparea por momentos.

Como no es asunto que tenga alguna relación con él, no necesita conocer los problemas propios de la pareja.

Sin embargo es necesario referirse a ésta porque muchas veces el macho se ve enredado en ella y casi siempre termina viviendo en pareja.

GOBIERNO DE LA PAREJA

Si para cualquiera es difícil entender y manejar su propia vida, mucho más difícil le resultará guiar la vida de la pareja que conforma con su mujer.

Quienes defienden la monogamia, aunque no lo admiten saben que es imposible dar vida coherente a la pareja.

Quienes pretenden vivir en pareja, antes de dedicar el enorme esfuerzo que ello les exigirá debieran preguntarse ¿es realmente posible vivir en pareja?

Es claro que la pareja es algo distinto y ajeno a cada uno de sus integrantes.

Juan y Luisa viven en pareja. El par que conforman es distinto a cada uno de ellos. No se comportan, estando en pareja, ni como haría Juan estando solo, ni como haría Luisa en caso similar.

A pesar de esta comprobación casi evidente, existen pocos estudios sobre la psicología de la pareja.

Los psicólogos aparentan pensar que basta con preocuparse de cada uno de los integrantes de la pareja para tener el conjunto bajo control. Esto es falso y ellos lo saben.

Las primeras constataciones son:
• La pareja es un ente distinto de cada uno de sus integrantes.
• Gobernar la pareja es, para cualquiera de sus integrantes, más difícil que manejarse a sí mismo, lo que tampoco es fácil.

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