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LAS MANUERAS DEL BILLONARIO LUKSIC
Antonio García V. 01.07.2015

El hecho de que Andrónico Luksic haya resuelto personalmente el crédito a Caval tras asistir a numerosas reuniones al efecto puede entenderse de varias manueras.

¿Cabe pensar que Luksic no fue capaz de comprender que el paso que daba causaría grave daño al país y a la presidenta recién elegida?

¿O es que Luksic quiso dar la señal de que él recibe a quien quiere y que hace lo que sea para amarrar una y mil veces los intereses del país a los suyos, sin importar las consecuencias?

También cabe la posibilidad de que no se hay dado cuenta del error que cometía, pues dicen que escalar tanto ocho mil daña el cerebro incluso si uno es segunda generación de billonarios, lo que implica que se lo trae dañado de antemano.

Otra posibilidad es que deliberadamente haya decidido poner al país y a la presidenta en una situación vergonzosa para demostrar que si Antofagasta Minerals está constituida en Londres y no en Santiago es porque aquí viven puros rotos cuya opinión e imagen le importa un poppy, que es la florcita que se ponen en la solapa los ingleses para conmemorar los caídos en las guerras de Europa, aunque Andrónico pueda pensar que es a los caídos de la mata, parte de los cuales son precisamente los billonarios de segunda y peores generaciones.

Si las empresas de Andrónico están involucradas en la contaminación de Antofagasta, en las aguas de Caimanes, en el crédito oscuro del Banco Estado para la compra del Banco de Chile, en las demandas que tiene "el Chile" por condiciones abusivas en los "sobregiros pactados", en el negociado que le permitió vender el Hotel Carrera a un precio obsceno al ministerio de Relaciones Exteriores y en mil otras vagabunderías que él conoce mejor que nosotros, ¿no era mas lógico que le hiciera ver a "la nuera" las graves implicaciones del paso que ella pretendía dar y que le dijera que por el bien del país, a quien  le debe toda su fortuna, y por el bien de la recién elegida presidenta, a quien le debe termoeléctricas hasta el aburrimiento, era mejor que ese crédito no fuera otorgado?

En esa negociación en la que participaron una pseudo emprendedora desbocada, descocada, desdorosa, desubicada, desmadrada, desesperada y polilexusada y el experimentadísimo representante de un gran grupo empresarial con intereses en diversas áreas de la economía nacional, es evidente que existe un solo responsable de las decisiones que se tomaron y de los daños causados al país y a su presidenta.

Antonio García Varela

Escribidor

Antonio García V.
Ex candidato a alcalde de Valparaíso, ciudad cicatriz